Buenas noches mis Amados, mis Amigos y Seguidores de Biblia y Poesía. Yo sé que para esta altura muchos, incluyendome a mí, estamos haciendo ya las RESOLUCIONES de fin de año para dejar todo lo malo aquí y no llevarlo hacia el Año Nuevo. OJALÁ que hagas el tiempo para repasar lo que quizás no funcionó bien este año y te determines a cambiarlo para el próximo que está ya pisándonos los talones. Les deseo una maravillosa noche de Reflexión.
Para escuchar la poesía en la voz de Diana Hernández, pulsa sobre el enlace:
OJALÁ! (poesía de Jorge Oyhanarte, argentino)
Ojalá consigas viajar dentro de ti,
hasta el Altar Divino que hay en tu corazón,
y allí encuentres la clave de cuál es tu misión…:
¡esa razón precisa por la que estás aquí!
Ojalá conectes con tu guía interior,
y ya no te abrumen los pesares del mundo…
Ojalá comprendas que el dolor más profundo,
trabaja en nuestras vidas como un “despertador”…
Ojalá te des cuenta, sin asomo de duda,
que la actitud que adoptas al desandar tu vida,
es la que hace que el viaje sea en bajada…o subida…,
la que te pone trabas…, o la que va en tu ayuda…
Ojalá te eleves sobre los mundos densos
y las limitaciones que nublan tu conciencia…
Ojalá consigas anular la creencia
de que estás solo, aislado, inútil, indefenso…
Ojalá conectes con tu Poder Sagrado…,
ese que te alimenta desde un plano invisible…,
y a veces consigue que logres lo imposible…
¡cuando a los “no se puede” los dejas a un costado…!
Ojalá te adentres parsimoniosamente,
en el único tiempo que te es dado vivir…:
¡ese instante perfecto, en el que tu existir,
se ubica en el ahora de un eterno presente…!
Ojalá que a caballo de tu creatividad,
tan sólo participes de lo justo y lo noble…,
y que a tu paso muestres la solidez del roble…,
¡y simultáneamente…, del junco la humildad!
Y ojalá regales tu luz…y tu calor…,
sin pedir nada a cambio ni esperar recompensa…,
porque en definitiva no hay paga más inmensa,
que pasar por la Vida… ¡siendo un Faro de Amor…!
Quizás seas el único que se lo digas.
VÍDEO PARA REFLEXIONAR. Si supieras cómo te amo, Hermana Glenda.
Nunca sabremos cuánto ÉL nos ama, y quizás nunca sabremos cuánto alguien nos ama, a menos tengas el coraje de averiguarlo por tí mismo(a).
El enlace o shortlink de este programa es: http://wp.me/p59toT-uQ